Oración a San Jerónimo de Estridón para que me de capacidad
Oración a San Jerónimo de Estridón para que me de capacidad. Oh, San Jerónimo de Estridón, erudito y sabio traductor de las Sagradas Escrituras, te invocamos con humildad y devoción en busca de tu intercesión ante Dios Todopoderoso. Tú, que dedicaste tu vida al estudio y a la comprensión Divina.
Concédenos, oh glorioso Santo, la gracia de abrir nuestros corazones y mentes a la sabiduría divina que fluye de las Santas Escrituras. Que, al igual que tú, podamos perseverar en la búsqueda del conocimiento y la verdad, inspirados por el amor a Dios y al prójimo.
Padre de la Iglesia, modelo de erudición y piedad, guíanos en nuestros momentos de estudio y reflexión. Ayúdanos a superar los obstáculos que encontramos en nuestro camino hacia el aprendizaje y la comprensión, y danos la fuerza para seguir en nuestro esfuerzo por crecer.
Oh, San Jerónimo, que tu ejemplo de dedicación y trabajo diligente en el estudio de las Escrituras nos inspire a buscar siempre la excelencia académica y el crecimiento personal. Que podamos honrar tu memoria no solo con palabras, sino con acciones y la verdad.
Te suplicamos, oh Santo Patrón, que nos concedas la capacidad de discernir con claridad la profundidad y el significado de las enseñanzas divinas contenidas en las Sagradas Escrituras. Que podamos aplicar este entendimiento en nuestros estudios.
San Jerónimo de Estridón, ruega por nosotros ante el trono de la gracia divina, para que podamos ser llenos de sabiduría y entendimiento en nuestros estudios, y así glorificar a Dios con nuestras mentes y corazones.
Amén.
Reza cada vez que vas a estudiar o leer
San Jerónimo de Estridón
También conocido como San Jerónimo, fue un erudito cristiano, teólogo y uno de los Padres de la Iglesia Latina. Nació alrededor del año 347 en Estridón, una ciudad ubicada en la región de Dalmacia, que hoy en día forma parte de Croacia.
San Jerónimo es especialmente conocido por su trabajo como traductor de la Biblia al latín, conocida como la Vulgata, que se convirtió en la versión estándar de la Biblia en la Iglesia Católica Romana durante muchos siglos. Esta tarea monumental le ocupó gran parte de su vida y contribuyó significativamente a la difusión y comprensión de las Escrituras en el mundo occidental.
Además de su labor como traductor, San Jerónimo escribió numerosas cartas, tratados teológicos y comentarios sobre las Escrituras, lo que lo convirtió en una figura influyente en el desarrollo del pensamiento cristiano. También fue conocido por su vida ascética y su dedicación a la oración y la penitencia.
San Jerónimo falleció el 30 de septiembre del año 420 en Belén, donde pasó los últimos años de su vida. Su legado como erudito, traductor y teólogo sigue siendo reconocido y venerado en la tradición cristiana, y es recordado como uno de los más grandes estudiosos de las Escrituras en la historia de la Iglesia.